La Última Estantería

Hace algún tiempo leí un libro de Carlos Cuauhtemoc Sánchez que me gustó bastante, su nombre es la fuerza de Sheccid... hubo una reflexión que aparece en ese libro, se trata sobre los subjefes déspotas, la verdad nunca me imaginé que podría aplicar esa lectura a mi vida diaria...

Resulta que hace poco me topé con un subjefe déspota: mi maestro de métodos de investigación... este 'maestro' nos dejó una tarea de investigación que iba a abarcar todo el semestre. Todos en mi grupo son muy trabajadores y se partieron el alma tratando de hacer el dichoso trabajito... El punto es que el trabajo era DEMASIADO y el maestro dijo que lo quería terminado en menos de 3 días, obviamente todos nos alarmamos y comenzamos a hacer el trabajo inmediatamente, cuando ya solamente faltaba un día, mi amiga Yareth y yo nos reunimos para ponernos a trabajar en serio, ella vive en una comunidad que está como a 45 min. de donde yo vivo así que no se podía quedar hasta tarde porque los camiones salen hasta las 8 de la noche...

Nos pusimos a trabajar como histéricas hasta que dieron las 7 y yo le dije que ya se fuera y que yo lo terminaba... terminé a las 12 de la noche... Cuando llegué a la escuela al día siguiente me pasó lo peor... me dí cuenta de que había impreso algunas hojas en blanco y negro y eran a color... como Yareth y yo queríamos que nuestro trabajo estuviera 'perfecto', pedimos ayuda a varios maestros para salir de la escuela, después de varios intentos fallidos, mi maestro de física nos dejó salir... pero yo salí con otra amiga (no con Yareth, que se quedó terminando el trabajo en el salón).

Cuandp íbamos a medio camino, nos dimos cuenta de que eran las 10:05 am y el examen de métodos de investigación era a las 10:00! rápidamente pedimos un taxi y nos regresamos a hacer el examen... cuando llegamos a la escuela varias compañeras nos dijeron que apenas acababa de empezar, tenía cuando mucho 5 minutos... llegamos y el maestro no nos dejó pasar... nos dijo que por irresponsables, y por más que intentamos hacerlo razonar no nos dejó y nos dijo que nos íbamos a quedar sin examen parcial...

Si nos hubiera dicho nada más eso, tal vez lo habríamos dejado ahí, pero no fue solo eso... fue la actitud que él tomó con nosotros, la verdad nos faltó el respeto y nos dijo varias cosas que consideré como un insulto, ya que yo había trabajado demasiado en ese trabajo... Viridiana (mi otra amiga) se enojó y quería ir a 'cantarle' sus verdades al maestro, pero decidimo calmarnos y hacer algo más inteligente: reportarlo con el director...

Sabíamos que ya no podíamos hablar con el maestro... así que cuando íbamos camino a la oficina del director nos encontramos con varias compañeras que también tenían queja del maestro, fíjense: unas compañeras estaban haciendo el trabajo por parejas y no habían terminado de imprimirlo, porque como eran muchas hojas no les había alcanzado el dinero, ya que ellas son de bajos recursos... trataron de que el maestro les diera otro día para conseguir el dinero y el maestro se negó, es más, ni siquiera les dio oportunidad de terminar de explicarle las cosas... Otra compañera no había terminado porque trabaja y no le daba tiempo... y así nos encontramos con varias(os)... Fuimos a hablar con el director y aunque el maestro se enojó (¡que bueno!) llegamos a un acuerdo... yo hice el examen aunque en la tarde... y a mis compañeras les dieron más días para terminar el trabajo...

Esta historia tuvo un final feliz... pero historias como estas pasan todos los días... y no sólo en las escuelas, pasan en todas partes: funcionarios públicos que abusan de su poder, juniors que se escoltan en el poder y la influencia que tienen sus padres... Ellos, y más personas son conocidos como 'subjefes déspotas' abusan de su poder para hacer sentir mal al prójimo... así ellos creen que son superiores... se preguntarán... ¿por qué SUBJEFES? ... les diré porque... la gran mayoría de las personas que son déspotas, no son los dueños de las empresas, no son los jefes... generalmente las personas déspotas se escudan detrás de los verdaderos Jefes de los que de verdad se esfuerzan y generalmente los jefes (en el caso del director de mi escuela) son los últimos en enterarse...

Por eso es que no hay que quedarse callados... nosotros somos más, debo de reconocer que al principio yo tenía miedo de hablar con el director, porque como todavía no pasaban las calificaciones a las boletas, el maestro podía bajarnos de calificación o reprobarnos, pero al escuchar como mis compañeras también habían sido tratadas así, decidí (junto con Viridiana) que no podíamos quedarnos de brazos cruzados... no podíamos permitir que siguiera abusando de su poder... porque ese maestro tiene poder... no es sólo un maestro, es el presidente de la academia de métodos de investigación, es por eso que no sabíamos si el director nos iba a creer, pero por suerte más personas se nos unieron y pudimos enfrentar a ese 'profesor'...

No hay que quedarnos callados ante los abusos del poder... ¡BASTA DE INJUSTICIAS !